domingo, 6 de enero de 2013

Los Comemierdas

Existen muchas teorías acerca de los grupos relativamente pequeños que concentran un gran poder y que dominan el mundo. Ya todos hemos oído hablar de los illuminati, Bilderberg, logias masónicas, Rockefellers, Rothschilds, etc. Incluso hay quienes hablan de especies extraterrestres como los reptilianos o los annunakis.

Pero, pensándolo bien, ¿no habría una forma mejor y más simple de distinguir y agrupar a estas élites sin tener que recurrir a ninguna de esas teorías?
Es decir, ¿qué nos importa que un individuo poderoso sea masón de grado 33, primo de Rockefeller o cuñao de un Rothschild? ¿Qué nos importa de dónde provengan Felipe González, Josemari Aznar, Rodrigo Rato y la interminable pléyade de palmeros que les jalean?

Ya ha habido buenos intentos de definir de una manera simple a esta pequeña fracción de la sociedad. En Occupy Wall Street decidieron denominarles el 1%. Ahora bien, con esta forma de expresarlo, ¿realmente describimos a estos individuos? Decimos que son muy ricos, vale, pero ¿nos basta con ello? Mucha gente sigue pensando que hacerse rico en sí no es malo, que uno puede hacerse rico de una manera honesta. Nos ponen una y otra vez el ejemplo de exitosos empresarios como Amancio Ortega, que desde pequeñito se esforzó duramente vendiendo batas para prosperar en el mundo de los negocios.

Entonces, aquí existe un problema. Ser rico va asociado en muchos casos a trabajar duro.

¿Y sí en lugar de definir a la fracción privilegiada de la sociedad a través de su poder adquisitivo, la definiéramos a partir de su capacidad de asimilar la explotación laboral, el fraude fiscal, la corrupción, el expolio y contaminación del medio ambiente, el expolio de los recursos de pueblos autóctonos, la tortura, y un larguísimo etc? Podríamos matar dos pájaros de un tiro: clasificar a ese minoritario grupo social de una manera sencilla e intuitiva, ¡y a la vez describirla en su esencia más profunda!

Es por ello por lo que escribo este artículo. Para proponer la redefinición del 1% como Los Comemierdas, individuos que, con tal de ganar pasta, son capaces de digerir cualquier injusticia que se les ponga delante sin sacrificar un sólo minuto de sus horas de sueño.

Mr. Maunitze